40cm x 50cm
Óleo sobre lienzo
Parte de la colección: Tiempo
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En el óleo se aprecian colores de confusión y paz, una bipolaridad entre verde, negro y azul que congenian como cercanos en el circulo cromático.
Se observa un individuo varón sosteniendo la mano a la nada, y debajo de ese simbolismo se ve una sombra.
A la izquierda del cuadro esta el mismo individuo ahorcado plasmado en el reflejo de un espejo.
Si seguimos la trayectoria nos lleva a un collar que cuelga del reposabrazos de la silla a la derecha.
Esta pieza representa la espera a una respuesta incierta y el desaliento de su conclusión de ahí el nombre mismo “Siempre te vas” que hace alusión a un ciclo interminable de amor y cuestionamiento.

Veo a la inspiracion como una amante, ella me usa cuando quiere y yo soy esclavo de su verdad.
Amo pintar, pero que pueda hacerlo solo cuando no quiero vivir me consume el alma, es porque mi existencia depende de ello.
Eres mi amada…
Con tu partida se fue por un momento mi esencia, te amo con todo mi corazón, y no niego el dolor.
Me arde en el pecho saber que me quisiste y que el tiempo no quiso que estuviéramos, la llama de nuestro querer ardió sin darnos calor, yo quise recoger las cenizas para volver a avivar el fuego, pero esa materia de luz nunca resplandeció de la misma manera.
Te he escrito tanto y de tantas formas que ahora lo único que hago es pensarte, imaginar que hubiera sido, fuiste un ruego de amor, una espera, un tiempo, de ahí el nombre de la colección.

Te amo y siempre te amaré,
te quiero, aunque eso me mate,
me desvanece tu rechazo y olvido,
ese día te fuiste y ella volvió.

“ Yo te puedo esperar lo que ocupes, te quiero… no, te amo en verdad, tu toma el tiempo que ocupes, no hay prisa, yo estaré aquí cuando lo necesites…”